De continuar como va, con presiones del grupo de la “Fidelidad” que pretende perpetuarse en el poder mediante posiciones en el próximo Congreso Local y en el próximo gabinete, poniendo todo tipo de escollos en el camino hacia su campaña político electoral y sin el apoyo que debiera tener, tal como se lo ordenaron al gobernante, la posibilidad de que a media campaña presente su renuncia a la candidatura priista al gobierno es un escenario que ya se empieza a contemplar. Y es que de chicanadas, acosos, gracejadas a sus costillas y todo tipo de engaños, Yunes Landa ya está hasta el copete. ¿Qué haría el CEN del PRI ante una sorpresiva renuncia de su candidato en Veracruz? A lo mejor reacciona el gobierno federal y por fin decide entrarle para resolver el problema que representa el “lastre” que trae arrastrando un político serio como es Héctor Yunes Landa.